Para desterrar lo malo y que entre lo bueno en año nuevo.

Necesitas

- 6 velas blancas o doradas 
- 2 hojas de papel 
- Lápiz o boli  
- Un recipiente de metal con agua. 

Necesitaremos un espacio en nuestra casa tranquilo, donde nadie nos moleste ni pueda interrumpirnos. Encenderemos las 6 velas y primero que nada daremos gracias por todo lo bueno que hemos recibido durante el año en curso. Agradecer es un acto de reciprocidad con el Universo, tenemos que devolverle con la energía de la gratitud lo que nos ha brindado. Luego pensamos en aquello que no hemos alcanzado, las experiencias que consideramos negativas y reflexionamos sobre ello. Anotamos en una hoja lo más importante y procedemos a quemarlo mientras pensamos que todo ello quedará en este año que termina, no vamos a cargar con esos obstáculos durante el año nuevo. Apagamos las velas y nos quedamos un momento en el silencio, es la transición hay la luz y debemos sentirlo internamente. Volvemos a encender las velas y pensamos ahora en todo lo que deseamos que llegue a nuestra vida en el nuevo año que entra, también lo anotamos de la manera más concreta posible en la otra hoja de papel que nos ha quedado. Doblamos el papel y lo dejamos debajo de la vela que tengamos más al centro. Nos quedamos un momento sintiendo cómo la energía de esos buenos deseos llega a nosotros.